No va más. Se terminó la carrera deportiva del portero Nicolás Peric Villarreal, quien confirmó que se retira del fútbol profesional, siendo su último partido el pasado 30 de enero, en la derrota 0-2 de Rangers ante Deportes Melipilla en el Fiscal de Talca, donde el Rojinegro quedó eliminado y no logró el objetivo final, que era el ascenso.
“Por lo menos el último partido que jugué en Rangers fui capitán, porque incluso en su momento no fui el capitán, así que me quedo, por último que fui el capitán. Y si las vueltas del fútbol dicen que no pude seguir jugando, no lo pude hacer no más, pero me quedo tranquilo, al no guardarme nada por estos colores. Si bien no es la forma de retirarme, me quedo con el reconocimiento, el cariño y la admiración. Eso es impagable”, dijo el “Loco”, que ahora asumirá nuevas funciones en la Corporación Municipal de Deportes de San Clemente.
DATOS
En 1998 debutó el portero talquino y este 2021 dijo adiós con la tricota rojinegra, al no estar en los planes del entrenador Luis Marcoleta, aunque se espera que en un futuro podría ser funcionario de la institución piducana.
Respecto a lo que fue su determinación de colgar los guantes, Peric, acotó: “Me retiré físicamente bien, me sentí cómodo, peso aceptable. Terminé contrato y la decisión del técnico era buscar otro arquero, que le llenara sus expectativas. En el fútbol las cosas son así, hay una persona a cargo, es el que toma las determinaciones. No calzaba con lo que quería de un portero y tuve que tomar la decisión de retirarme”.
Consultado si se retiró o lo retiraron, sentenció: “Me retiraron, claramente”. Además, contó lo que le faltó en su carrera y dijo: “Salir campeón con Rangers, levantar una copa con Rangers. No tengo dudas que lo único que va a quedar doliendo es eso”.
A los 42 años se retiró el portero que defendió los colores de Rangers, Universidad de Concepción, Unión Española, Audax Italiano, Gençlerbirliği S.K. de Turquía, Everton, Argentinos Juniors, Olimpia, Cobreloa y Cobresal, siendo un referente de Rangers y esparando sumarse a algún cargo en un futuro no muy lejano.