Los próximos meses de octubre y noviembre marcarán un hito en nuestro país, ya que se llevará a cabo el evento deportivo más grande que hayamos albergado: los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023.
Este acontecimiento internacional tiene a cientos de deportistas en la mira, quienes buscarán no solo medallas para sus países, sino también los resultados esperados y los boletos directos a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos París 2024.
Si bien nuestros representantes nacionales se encuentran inmersos en el periodo de clasificaciones, marcas mínimas y mejora de rankings para asegurar su participación en Santiago 2023, en este momento el desafío se centra en varios aspectos fundamentales. Entre ellos, destaca la necesidad de contar con una infraestructura deportiva de primer nivel, una villa deportiva adecuada y, por supuesto, el recurso humano necesario, como voluntarios, personal bilingüe, logística tanto aérea como terrestre, y jueces calificados para las 60 disciplinas Panamericanas y 18 Parapanamericanas.
Ante esta realidad, surge una pregunta crucial: ¿Estamos preparados para este desafío? Si bien existen noticias alentadoras, también debemos reconocer que nos encontramos en una situación desventajosa en algunos aspectos. ¿Será este desafío el que finalmente promueva el deporte como una alternativa saludable de vida?, ¿este evento será capaz de incentivar la cultura deportiva? ¿Comprenderemos que el valor de un podio no solo reside en el talento, sino también en la inversión económica, tanto pública como privada? Por supuesto que estas interrogantes serán respondidas con el tiempo, por lo cual no es necesario el apuro, pero si la reflexión correspondiente.
Estoy convencido de que los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos serán trascendentales deportivamente hablando. Por lo que creo importante que cada persona apasionada por el deporte tenga la oportunidad de conectar y conocer otras disciplinas, y que no solo sea hincha de nuestros deportistas nacionales, sino también de aquellos atletas de alto rendimiento que serán protagonistas en los futuros Juegos Olímpicos.
Este evento no solo representa una oportunidad para destacarnos como país anfitrión, sino también para promover una cultura deportiva sólida, fomentar la inversión en infraestructura y recursos humanos, y dejar un legado duradero en la sociedad.
La invitación es a vivir y disfrutar de esta experiencia multideportiva, a ser parte de la historia y a apoyar a nuestros deportistas en su búsqueda de la excelencia. Que los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023 sean un catalizador para el desarrollo del deporte en nuestro país y una fuente de inspiración para las generaciones venideras.
