Muchas veces pensamos que las personas que hacen ejercicio, lo realizan para tener un físico de modelo o de privilegio, pero la verdad es que la mayoría lo realiza para, obviamente, sentirse mejor consigo mismo y mantenerse en un peso adecuado, estable y una salud mental despierta y saludable.
Suele suceder que con los fríos los días cortos y oscuros, muchos caen en una depresion sin darse cuenta, se quedan encerrados en casa sin salir a ninguna parte y solo dedicándose a comer, perdiendo contacto con sus amigos y se ponen mal genio porque se sienten gordos y pesados.
Es una realidad que ocurre, que se va dando po una vida sedentaria, que pasa también por los tiempos de las personas, no dándole el espacio suficiente a la actividad física.
Cuando con un poquito de ánimo, le ganan a esa “flojera”, a veces mal llamada, que podría ser el primer paso a esa depresion.
Hay que dar ese paso y será diferente, pues puedes comunicarte con tus amigos, recuperar energías, llegar a comer más saludable, mantener su mente y su cuerpo sano y feliz durante todo el año y no solo desde septiembre en adelante, que ya es bastante difícil lograr lo que quieres para el verano.
Un cuerpo sano se cultiva desde el invierno.