Una temporada rara y extraña es la que se ha vivido, sobre todo, en la competencia de la Segunda División Profesional, donde militan Deportes Linares e Independiente de Cauquenes. En el caso del “Depo”, han vivido un año de sufrimiento en distintos ámbitos ante la complicación financiera, las diferencias entre la Sociedad Anónima y la Corporación, brote de Covid-19, a lo que se suma la irregular campaña.
ILUSIÓN
Más allá de eso, en la entidad albirroja tienen la ilusión de mejorar en la segunda rueda, ya que en esta inicial etapa solamente han conseguido cuatro puntos en ocho presentaciones, restándole por jugar tres cotejos pendientes, los que se llevarán a cabo a la par de la segunda rueda de este certamen. De hecho, el encuentro contra Colchagua, de la última jornada de la inicial etapa, se suspendió a raíz de los casos positivos en el elenco linarense en la previa al compromiso con Lautaro de Buin.
Durante esta jornada de martes, el plantel será sometido a exámenes PCR y, de salir bien esas pruebas, este jueves o viernes retomaría los entrenamientos la plantilla maulina, mientras que el primer fin de semana de diciembre partiría la segunda rueda de la Segunda División.
“En estos días nos ratificarán el fixture para esta segunda parte de la competencia, ya que nos indicaron desde la ANFP que será otro orden, cambiando obviamente la localía”, dijo el presidente de la Corporación Deportes Linares, Mauricio Loyola.
ESPERAN
En el Maule Sur esperan que sus jugadores hayan dejado atrás el capítulo del Coronavirus para enfocarse de lleno en mantener la categoría, el objetivo para este 2020.
Gráfica: Gentileza Patricio Arias- ANFP