Estamos volviendo a la normalidad en todos los ámbitos, por eso, la importancia de la planificación estratégica para retomar el desarrollo deportivo.
La planificación estratégica es un modelo que tiene por eje, la distinción entre pro actividad y reactividad. Esta distinción descansa en la convicción de que el futuro será diferente al pasado, por lo tanto, intenta imaginar un futuro consensuado a partir del presente, preverlo y planificar las estrategias a seguir para su logro, considerando los posibles cambios, a partir de las fuerzas ya perceptibles en la actualidad.
Usualmente, el punto de partida para determinar dónde se encuentra una institución deportiva es su perfil y, por tanto, hacia dónde debe dirigirse, es decir, cuáles son sus objetivos y metas a cumplir. De acuerdo a lo anterior, el propósito y los objetivos principales son los puntos finales hacia los que deben dirigirse todas las actividades.
O sea, la intención estratégica es la determinación de triunfar en un entorno competitivo. Las diversas alternativas estratégicas se desarrollan con base, en un análisis de los ambientes internos y externos de la organización.
Puede seguir muchos tipos de estrategias, como especializarse en un deporte, diversificarse en varios deportes, tener alianzas estratégicas, pero en la práctica se siguen varias estrategias combinadas, sobre todo las grandes instituciones deportivas.
Una moderna herramienta para el análisis de situaciones es la matriz FODA, que significa F: fortalezas (internas) O: oportunidades (externas) D: debilidades (internas) A: amenazas (externas). El punto de partida del modelo son las amenazas, la percepción de crisis de problemas.
Teniendo esta breve descripción, nos damos cuenta que, toda entidad deportiva, debe planificar, en forma estratégica, para poder prever el futuro que es incierto. Recordemos algunos deportes, que en un momento estuvieron en la cúspide mundial, como el tenis, con Marcelo Ríos, Fernando González y Nicolás Massú; la gimnasia artística con Tomás González; el fútbol con la famosa generación dorada y otros deportistas que tuvieron una destacada participación internacional.
Se puede suponer que nuestros jóvenes practicantes tenían como modelos a estos atletas de elite, pero, no se pensó que todo en la vida tiene un ciclo.
Creo que se descuidó la formación o la detección de nuevos talentos o faltó cooperación financiera para ayudar en la planificación de su desarrollo. La gran interrogante, ¿se discutió la importancia de una planificación estratégica?.
Debemos aprender del pasado.
*Profesor de Educación Física.
Magíster en Educación (e) Gestión Educacional.
Doctor en Ciencias de la Educación (e) Evaluación y Acreditación.